lunes, junio 18, 2012

"Grosse Kanonen"


Los grandes cañones alemanes "Dora" y "Gustav", (en la imagen) fabricados a petición de Hitler por Krupp en el curso de la IIGM eran un desarrollo o herederos de los "Grosse Bertha" y los "Pariser Kanonen" del mismo fabricante en la IGM.

Estos antecesores eran unas monstruosas piezas de artillería de asedio, de 210 mm. de calibre y un largo de tubo de 36 metros (en el caso del "Cañón de París"), reforzado con un arriostrado de cable de acero para evitar que, debido a su largura, se pudiera doblar o hasta romper. Tenía un alcance de 128 kilómetros y en el punto álgido o apogeo de su trayectoria parabólica, el obús, disparado en un ángulo fijo de 55º, alcanzaba una altura de 40 kilómetros; récord absoluto de altura alcanzada por algo lanzado por el hombre, hasta la llegada de las V2 o cohetes balísticos alemanes de la IIGM.

Los "Dora" y "Gustav" eran de un calibre de 800 mm., con un tubo (no arriostrado) de 32 metros. Un alcance de 37 kilómetros para las municiones anti-blindaje y de 45 kilómetros para las explosivas. Se desplazaban y disparaban (con una cadencia de 2 disparos por hora) desde una plataforma metálica que discurría sobre una doble vía férrea. El tubo tenía que ser cambiado, por desgaste, cada 300 disparos. El "Gustav" fue utilizado en el sitio de Sebastopol, durante la Campaña de Crimea de la Operación Barbarroja o invasión de la URSS y en su avance hacía el Caucaso.

A pesar de su exhibición tecnológica y su teórico poderío, estas armas no sirvieron, en la practica, casi para nada. En ninguna de las dos guerras.

Coronel Von Rohaut

(PS) Ya modernamente, el ingeniero y físico canadiense (era un genio) Gerald Bull, que había estudiado estas grandes piezas alemanas, fue contratado por Sadam Hussein para que le diseñara un gran cañón, que jamás fue terminado ya que, entre otras cosas, el país no disponía de los conocimientos ni recursos técnicos para llevarlo a cabo, ni sus enemigos le dejaron desarrollarlo.
Bull murió, asesinado a tiros en plena calle de Bruselas, de forma misteriosa y jamás aclarada. Pero, con anterioridad, había diseñado un cañón de campaña de 155 mm (que es el calibre standard para las piezas modernas) para Sudáfrica, (cuando todavía era blanca y aliada y derivado del que había construido para Canadá) y que durante mucho tiempo fue la mejor pieza de esta categoría y que disparaba a 40 kilómetros. Y que ha sido imitada por medio mundo, incluidos los chinos.

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