sábado, septiembre 17, 2011

A la cárcel con los que quieren terminar con ETA


Unos jueces, unos fachas como casi todos los de este colectivo ultranacionalista español a los que nadie ha elegido (contrariamente a la mayoría de jueces americanos) y que se han autoerigido y proclamado como "tercera cámara legislativa de España", han decidido, con justificaciones espurias, con excusas sudadas que huelen que te cagas, condenar a 10 años de cárcel a los dirigentes patriotas vascos (Otegi y Usabiaga) que llevan ya algunos meses intentando que la ETA más extrema deje de dictar el camino hacía la paz en el País Vasco.

El mismo dirigente del PSOE vasco, al que nadie podrá denunciar por independentista ni pro-etarra ni tan solo tachar de nacionalista vasco, ha señalado que la sentencia (que solo han celebrado los putos "peperos" fachas) es una burrada (lo ha hecho con otras palabras, ya que no tiene la libertad de expresión que tengo yo).

Y un periodista veterano y liberal, ex director de La Vanguardia y por ello nada sospechoso de veleidades nacionalistas, Lluis Foix, ha dejado dicho "Tal parece como si el fín de ETA no interesara".

Viene a confirmar lo que yo he manifestado a menudo y desde hace ya bastantes años: a la ultraespaña no le ha convenido nunca terminar con un "enemigo exterior" tan útil, tan rentable.
Primero dijeron (Aznar "dixit") que sin bombas ni violencia, hasta de la independencia puede hablarse. Luego cuando ETA decretó una tregua que funciona (treguas anteriores fueron debidamente dinamitadas, después de ser anatemizadas como treguas-trampa y luego hechas fracasar) se desdijeron de lo anterior y vinieron a decir que no era suficiente, que las nuevas reglas solo contemplan la rendición incondicional: sin armas y manos arriba.

Y ahora que dirigentes inteligentes (y después de unas elecciones municipales donde los "abertzales" arrasaron) están abriendo una nueva vía, sin bombas y, además, dentro de las pautas democráticas, se les mete en la cárcel para varios años y en paz. Y si pudieran les harían "un Conde de Montecristo": encerrarlos en una mazmorra oscura y sin comunicación con el exterior, de por vida. Y es que la ultraespaña siempre ha sido demócrata de toda la vida que te cagas...

Coronel Von Rohaut

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