viernes, julio 02, 2010

La debida uniformidad (militar) y sus transgresiones

En un post anterior glosaba lo incómodos y limitativos que son los pesados uniformes modernos, con sus protecciones, su chaleco "táctico" más chaleco antibalas y/o antifragmentación, equipos de visión nocturna y, especialmente, de transmisiones más GPS, ordenador portátil, etc.

Y alababa la libertad que proporciona un uniforme de combate ligero y adaptado a las misiones, el terreno y las circunstancias.

Hace algunos años el Ministerio de Defensa de Francia publicó, parece que por error ya que las imagenes de operaciones encubiertas no se muestran, la foto de arriba donde se aprecia que ni los uniformes son totalmente reglamentarios, ni mucho menos las armas son las oficiales de entonces y ni siquiera las botas que se pueden ver son los reglamentarios "rangers" de paracaidista si no que parecen más ligeras. Y que estos soldados en misión de información y reconocimiento, infiltrados en el interior del país vecino y no beligerante de Sudán (y que por lo tanto no podían estar ahí) eran de una unidad de "Operaciones Especiales", también se puede deducir por la excesiva longitud del pelo y las poco marciales gafas de sol.

Adaptado al terreno, se llama esta figura. Y lejos del cuartel y de la cadena de mando, añado yo.

Coronel Von Rohaut

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