lunes, mayo 10, 2010

Chaqueteros sectarios

Leo una entrevista en "La Contra" al guionista de culebrones catalanes y "rey" de las tardes de TV3, Josep M. Benet i Jornet y en una respuesta afirma " Cedí mi estudio a un par de etarras. Uno fue detenido y cantó. Aclaro: ¡ la progresía barcelonesa de 1975 los admiraba ! ¿Sabe quien me citó en su casa con unos amigos para conversar con etarras? Ernest Lluch".

Aclaro yo; Ernest Lluch, catedrático de economía, catalán, fue Ministro de Sanidad con Felipe González y en su día, al retrasar voluntariamente su llegada a una sesión del Congreso con unos documentos, facilitó que el PSC, del que era portavoz, perdiera su autonomía, su grupo propio en la cámara española y quedara integrado en el PSOE (Partido Socialista Obrero ESPAÑOL).

Pero no solo Lluch, un admirador confeso del País Vasco, amaba a los etarras, hasta que pasó a combatirlos. ¿Recuerda alguien una canción de otro notable "progre institucional", Joan Manuel Serrat, llamada "Edurne", dedicada, si no recuerdo mal, a rendir homenaje a los sufrimientos de una madre etarra? No la ha vuelto a cantar nunca más y creo que ni aparece en sus cancioneros o discografías. Y ahora despotrica de los patriotas independentistas vascos.

¿Que por qué de estos cambios de chaqueta, estos renegar de su pasado y de sus ideales? Pues muy sencillo, por orden u adoctrinamiento de sus jefes del Partido Socialista Obrero ESPAÑOL.

¡ Capullos asquerosos !

Coronel Von Rohaut

2 comentarios:

interbar dijo...

En un primer momento pensaron que ETA luchaba contra Franco y que su guerrilla urbana iba a tener éxito allí donde fracasó el maquis, pero luego se dieron cuenta de su error. ETA es una organización totalitaria y, no se olvide mi coronel, busca extender sus objetivos en toda España.

Coronel Von Rohaut dijo...

Vamos a ver, yo acepto lo que rectificar es de sabios...
¿Pero qué creian?
Nunca se ha podido hacer una tortilla sin romper los huevos y si aceptas el concepto de "lucha armada" al que los etarras se habían apuntado desde el primer día (y desde una ideología maoista y totalitaria, sí), luego no te rasgues las vestiduras, salvo que seas un hipócrita redomado.